El  aceite de sésamo japonés tiene un intenso sabor tostado. Se puede añadir como toque final a carnes, verduras, woks, arroces, ensaladas, salsas ligeras y para hornear a baja temperatura.
El aceite preparado a partir de semillas de sésamo es rico en antioxidantes, vitaminas E, B1, B2, B2, B3, B6 y B9, así como en minerales como calcio, magnesio, fósforo, hierro, zinc, manganeso y rico en omega-6.